Había decidido pasar lo más rápidamente posible por la puerta del baño y seguir hacia la salida mirando solamente al frente. Cuando mi pie derecho estaba en lo alto para continuar el movimiento, escuché a Beethoven, su música salía con todas sus fuerzas desde el interior del cuarto de baño. ¡La sonata que estaba escuchando cuando sucedió todo, la hermosa sonata, dejó mi cuerpo rígido, sin poder mover un músculo! ¿Por qué me haces esto Beethoven? ¿Tu música es la causante que desencadenó esta locura? ¡Por favor quiero una respuesta! ¡Voy a perder la cabeza! ¡Necesito una respuesta, alguien que me escuche! ¡No puede ser que todo esto me esté sucediendo! ¡¡No puede ser....!! ¿...............? ¡Sí! ¡Creo que.........! ¿Mi imaginación? ¡Claro! ¡Sí, ahora lo comprendo todo, es mi imaginación! ¡No encuentro otra explicación! ¡Posiblemente en algún momento mis fantasí...