¿MARINO DE MAR?
Como
una ballena sin rumbo me encuentro
en
un mar de pocas posibilidades.
Creyéndome
que estoy aquí o pensando que puedo flotar,
pero
dejándome llevar por la más puta de las corrientes marinas.
En
un entrañable océano, en una perdida cala
voy
exhibiendo mis locuras
Varado
está el viento, encallada la palabra
y
en esa obligada quietud me alimento del errante plancton que va dejando
los
difuminados delirios.
Hombres
de mar y mujeres de ensueño no se echen a la mar
sin
antes comprobar la salinidad de sus aguas.
Comentarios