El cuerpo

El éxito en el sexo radica
fundamentalmente en la forma en que utilizamos nuestro cuerpo. En el sexo como
en todo, si nos enfrentamos con la negatividad por delante, hay bien poco que
hacer. Cada acción sexual hay que vivirla como si fuera la última, y como si la
vida nos fuera en ello; con intensidad, pero con la cabeza fría. Sin duda el
cuerpo y los órganos sexuales arderán en fiebre al sentir y ser tocados, pero
en todo momento las emociones deben ser controladas, como las energías en la
vida diaria. El control nos lleva aun mayor disfrute del sexo. Con la cabeza
fría, podremos profesionalizar nuestra práctica sexual y obtener un mejor
partido. Nosotros llevaremos nuestro cuerpo al sexo, no lo contrario. El
placer del disfrute radica en el arte de dilatar el tiempo. A mayor ocio, mayor
satisfacción. Un cuerpo entrenado, dispuesto, y sin prisa, obtendrá una ayuda
sin límite de nuestras energías ocultas, las que en muy pocas ocasiones
utilizamos (en …