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LOS AMANTES DEL 26

                                                                                                                               -- 6 -- __ ¡Nada ni nadie nos podrá separar! --musitó Magdalena. __ ¡Nada ni nadie! --le respondió la voz. Esa voz que escuchaba cercana. __ ¡Estos son los mejores momentos de mi vida, y no dejaré que se marchen! --asintió Magdalena con la mirada perdida.                  A través del cristal las imágenes se van fusionando unas sobre otras sin consideración y sin pausa, porque es l...

LOBO-TOMÍA

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                                  No sé muy bien qué hacer con lo poco que me ha quedado intacto. En estos precisos instantes no es mucho pero al menos da para un consuelo. El azar, algunos lúgubres caminos y mis intensas  pasiones han terminado por agotar las reservas de estremecimientos. Esas piadosas mentiras que me han acompañado a lo ancho de mis embarazosos tropiezos. Ahora me encuentro aquí varado como un navío sin mar como un amante sin verso que no halla la certera métrica para adormecer los sentidos. Y es cuando se me empañan las horas porque el día se arrastra para que no lo vea marchar detrás de la luna. De esa engreída que cada mes derrama sobre mí su savia y no me deja otra opción que mirar al cielo y aullar.   

AUSENCIA DE…….

                                Se me ha fragmentado el alma y supongo que esta vez no lograré componerla. La tengo deshecha, dinamitada de la peor manera en que se puede dinamitar una exhausta alma. Injustamente mi alma, ha sido anegada de galimatías y desventuradas expresiones sumergida en un nefasto laberinto. Transformándola en un andrajo que se consume en cualquier primaveral atardecer.  Desde ahora he dejado de portar un alma, no la tengo, me he quedado sin ella, y no sé muy bien qué voy hacer a partir de este instante cuando me mire al espejo y no la divise. No seré más que un atemporal ser. Desde hace unos días mi alma, pero también mi vida, mis esperanzas, y mi licuada sangre, se han esfumado incomprensiblemente. Y no seré yo el que remedie estos males, porque tan sólo cuento, con un sólo gemido.

"LOS AMANTES DEL 26"

                                                                           --5--                  Magdalena la besó, besó la cabeza de su amado Federico con una intensidad que podríamos aclamar como sobrenatural, como nunca antes ningún ser besó cabeza humana cercenada de su cuerpo. Los labios de ella se fundieron a los de él sin premura, conquistando cada paraje de su desértica geografía y de su ambarina piel. Y esos mismos labios, los de Magdalena, por mucho que permanecieron besando, no hicieron el menor esfuerzo por separarse, deseaban recuperar en un eterno segundo el dilatado tiempo en el que no estuvieron unidos. Las deshechas bocas, una de pasión y la otra por intervención del pecaminos...

"LOS AMANTES DEL 26"

                                                                                                                                    --4--                  Un paso, dos, tres, cuatro……, el cuerpo de Federico se desplazaba sin rumbo fijo por el Parque Central. Su brazo, en un ángulo de noventa grado, aún mantenía dentro del puño el tallo de la flor; en cambio, la otra mano, escudriñó en uno de los bolsillos del traje, y maquinalmente extrajo lo que parecía una carta. La última carta recib...

"LOS AMANTES DEL 26"

                                                                                                               --3--                     Pero a pesar de las dudas y de las incertidumbres,  Magdalena  decidió continuar frente a la ventana, porque en lo más profundo de su alma algo le decía que en cualquier momento vería surgir por cualquiera de las esquinas del parque a su amado, y cuando ese instante llegase, no  pestañearía , porque el sólo hecho de hacerlo, la despojaría de incontables segundos que bien podría utilizar en el trayecto hacia sus brazos. Se lanzaría escaleras abajo, cruzarí...

LOS AMANTES DEL 26

                                                                                                                                                                             -- 2 --                  Era la primera vez que Magdalena hacía un viaje a la capital, o para ser más preciso, era la primera vez en casi todo para la joven  Magdalena . El primer encuentro amoroso, la primera partida lejos del hogar. También sería su primera noche en una habitación desconoci...